Después de los días de pánico y contingencia, se entiende que la demanda por la vacuna haya aumentado mucho, pero en realidad no hay estudios serios que demuestren que ésta pueda proteger de algún modo contra su prima agresiva, mejor conocida por la H maestra Elba Esther como HLNL.
Por supuesto, existe mucha controversia al respecto, pero mientras los intereses de las farmacéuticas estén en juego, es difícil confiar en la seriedad de investigadores y científicos. Algunos dicen que la gente vacunada con gripe estacional tiene menos posibilidades de morir de la influenza H1N1, pero por otro lado están muchas publicaciones de divulgación científica, en la que los especialistas echan abajo esta afirmación y aseguran que nada debe detener la campaña de vacunación a nivel mundial contra la influenza H1N1.
A fin de cuentas, mi principal razón para mantenerme al tanto de estas noticias es el tener a una bebé en casa. De ningún modo me interesa asumir una postura a favor o en contra. Más bien termino preguntándome cuándo empezará finalmente la distribución de esa otra vacuna y si habrá dosis suficientes para proteger realmente a la población.
Ay, el mundo tan lleno de controversias. Pero bueno, aquí nos tocó vivir.
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Me encanta que el doctor tome las medidas necesarias para evitar que su reloj se contagie.
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