viernes, 27 de agosto de 2010

El escritorio es el espejo del alma

Al menos eso dicen por ahí. Algunos amigos me han contado que en sus trabajos, las personas de recursos humanos toman muy en cuenta la armoniosa distribución de objetos en los espacios de oficina para determinar qué tan estable es un trabajador. Me pregunto qué harían en mi caso. ¿Me echarían de inmediato? ¿Me enviarían al día siguiente al manicomio La Castañeda (#sabesqueestasviejo)? No sé, a mí me parece que si alguien de recursos humanos tiene tiempo de andar checando los escritorios de otros, significa que hay que ponerlo a trabajar de verdad! ¿O no?




No hay comentarios:

Publicar un comentario